Hamaca
En este momento mi vida cuelga de dos hilos, bueno, de dos mecates mejor dicho. Se sostiene de una palmera y un árbol de donde se amarran los mecates. Estoy suspendido en el aire, extendido y estirado sobre un trozo de tela que se mece suavemente y me adormece como a un bebé.
Para arriba frente a mis ojos se extienden imponentes las verdes ramas de una palmera y si miro a la derecha, se extiende ilimitadamente nada más y nada menos que el mar Caribe, con todos sus misterios y caprichos.
¿Cómo es que con tan poquito se tiene tanto??? ¿Cómo no se me ocurrió antes amarrar los mecates en estos dos árboles? ¿De cuáles árboles me he estado colgando todo este tiempo? ¿De cuáles árboles cuelga mi vida????
1 Comments:
Sabés, pensándolo bien... la vida misma es un enorme árbol de dónde colgamos... y las meciditas son los diferentes momentos que vivimos. Para mi es maravilloso sentirme en esta hamaca, aún...
Excelente post... pequeño, sencillo pero profundísisisimo.
Me encanta leerte, desde ya... tu comentarista asidua.
Publicar un comentario
<< Home